viejos en el balcón

antes que el tiempo sea importante,
debo decirte: no mires la naturaleza,
no persigas esos paisajes.
ahora, cuando ya el tiempo nos tapó
podemos quedarnos acá,
en este departamento,
si es que llegamos a tenerlo,
solos con una taza de café.
cada uno en su propio pensamiento,
las calles a la diez de la mañana,
y todos aquellos que antes fuimos,
apurados, angustiados,
y morir.
nos sentamos mirando esto,
en silencio,
así,
hasta el fin.